miércoles, 8 de junio de 2011

DENTRO DEL PADDOCK

Karl Wendlinger, cuando el cerebro de piloto se borra de la cabeza


@Javier Rubio.- 07/06/2011 (06:00h)

“Pensé en aquel accidente dos veces, la primera con Rosberg, y la segunda con Pérez”. Peter Sauber volvió al pasado cuando vio a su piloto estampado contra el muro en el pasado Gran Premio de Mónaco, donde revivió uno de sus peores momentos en la Fórmula 1: el día en el que Karl Wendlinger se estrelló de idéntica manera con otro de sus monoplazas, el 12 de mayo de 1994.

A diferencia de aquel accidente, de aquella época, el mexicano podrá correr este domingo en Canadá, mientras que el austríaco vio truncada una muy prometedora carrera deportiva. Wendlinger personificó así esa doble y a veces cruel cara de la competición automovilística: por cada triunfador, otros muchos talentos quedan desplazados de la noria para no subirse nunca más a ella. Algunos, como Wendlinger, después de casi dejarse la vida.

En coma durante diez días

Fue un mayo verdaderamente dramático. Senna y Ratzenberger habían fallecido en la carrera anterior, en Imola, y a menos de cuatro minutos de empezar la primera sesión en Mónaco, apareció estrellado el Sauber de Wendlinger. Pero entonces el muro estaba mucho más cerca. El piloto mexicano pudo prepararse para el impacto dentro de un habitáculo más protegido. Pero el austríaco golpeó directamente con su casco contra los bidones de protección. Wendlinger entró en coma durante diez días.

A finales de 1989, Mercedes había seleccionado a tres jóvenes para su programa en el Mundial de Resistencia, las mejores promesas de la época: Karl Wendlinger, Michael Schumacher y Heinz Harald Frentzen. En 1993, cuando Peter Sauber entró en la Fórmula 1, fichó al piloto austríaco. Era tan rápido que Keke Rosberg llegó a decir de él que “estaba logrando fenomenales resultados en entrenamientos, pero parece que está también buscándose el “big accident”. Sus arrancadas son espectaculares. Hemos visto en él puro talento, parece que tiene un enorme potencial…” 1994 comenzó confirmando las palabras de Rosberg. Fue sexto en Brasil y cuarto en Imola. Pero, desgraciadamente, también llegó el gran accidente…


El último recuerdo de Wendlinger fue de la noche anterior, una final entre el Milán y el Salzbursgo. “Lo siguiente fue despertar, diez días después, en un hospital de Innsbruck”. Desde el momento del impacto había estado en coma. No recordaba nada. Su mujer, Sophia, y su madre, le intentaron explicar todo. Le daba igual. Porque su cerebro tampoco funcionaba como antes. Lo descubrió a bordo de un monoplaza de Fórmula 1.

El dilema tras un accidente

El austríaco vivió el dilema de todo piloto accidentado. O llevar a cabo una larga recuperación que deje calar en el subconsciente el impacto emocional, o acelerar el retorno para evitarlo y no perder los automatismos del pilotaje. Wendlinger escogió lo último. “En la Fórmula 1 no puedes esperar dos años para volver…” Si funcionaba, el contrato para 1995 estaba en la mesa.

En diciembre de 1994, en Barcelona, el austríaco volvió a pilotar. “No tenía fuerza muscular, en el cuello, la cabeza me dolía en los baches...” pero, sorprendentemente, logró el mismo tiempo que su colega Heinz Harald Frentzen. “Al llegar a casa le dije a mi mujer que lo bueno es que era mejor que antes”. Pero en febrero de 1995, cuando volvió a pilotar, descubrió lo mucho que se había equivocado.

Tres años para recuperar el cerebro

“Fue como si todo el “software” de la competición se hubiera borrado”, descubrió con amargura, “no tenía coordinación, concentración…” Todo lo instintivo para Wendlinger había desaparecido. “No era el mismo, hablaba igual, andaba igual, pero sus reacciones no era las mismas”, comentaba Max Welti, el team manager de la época. “Lo triste es que creo que ni siquiera el propio Karl puede decir cuáles son las diferencias en su pilotaje…” Tras solo cuatro carreras, en Sauber lo vieron claro y le apearon del coche. Tocaba Mónaco. “Sin duda, volví demasiado pronto”.

“Recuperar mi cerebro costó tres años, si no más… Después de las lesiones, de la recuperación, mi personalidad fue diferente”, reconocía recientemente. A pesar de que Audi le fichó para su equipo de turismos en 1996, no fue hasta 1997 cuando Wendlinger pudo ofrecer un rendimiento consistente al volante. “El software se recuperó”, reconoció. Y aunque se centró en los turismos -ganó el FIA GT de 1999- y sigue corriendo en el Campeonato GT1, el sueño de la Fórmula 1 se desvaneció aquella mañana del 12 de mayo en Mónaco.

¿Qué pensará en su fuero interno el piloto austríaco, viendo a su compañero de generación, con quien se medía al mismo nivel, lograr siete títulos mundiales? Como diría Stephen Hawking, “la vida no es como nos gustaría, justa o injusta, buena o mala. Es como es…” Seguro que esta es la lección que hubo de aprender Karl Wendlinger en la Fórmula 1

Fuente: El Confidencial


Salvando las distancias, que son bastantes, hay alguien de quien no he podido evitar acordarme.

8 comentarios:

  1. Entonces, ¿Es que está todavía cargando el sistema operativo de piloto? Pues peor me lo pones.

    Es así de fácil: o se pone las pilas YA, o a hacer otra cosa, que en la F1 el asiento te lo estan moviendo siempre. Ningún equipo se puede permitir esperar más que lo que esta haciendo Ferrari con Felipe

    Es que Noe, da igual ser buen o mal piloto, lo que importa es demostrarlo en cada carrera, y traer cuanto más puntos mejor, no le des mas vueltas.

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  2. Pero hay muchos factores en juego, Lukas, no solo la "gran mediocridad de la que tanto alarde hace". Por eso me pongo taaaan pesadita cuando todas las culpas van solo para él que no hace nada "porque no le da la gana".

    Sólo estoy buscando motivos factibles, porque los que la gente suele dar me suenan a pura antipatía hacia él (ojo, nadie de por aqui, anda que si tan mal les cae, para qué entran a mi blog XDDDDD)

    Siempre me preguntare que hubiera pasado de no ocurrir aquello. Si el motivo es ese o parecido a ese, como bien dices no le van a esperar eternamente, aunque sea injusto. En este mundillo vale mas el dinero y el negocio. Y para apoyar esto me quedo con la última frase sobre la vida: es injusta y cruel, pero es así :/

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  3. No sé, creo que cada caso es diferente. Yo no sé nada de medicina, pero supongo que no tendrá nada que ver una cosa con la otra, fueron accidentes muy distintos.

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  4. Una muy buena entrada, y muy cierta también.

    La verdad es que espero que no le ocurra eso a Massa (ni a nadie, la verdad), pero lo cierto es que por desgracia, este mundo de la F1 no espera a nadie. Sólo espero que demuestre lo que vale en lo que queda de temporada (que aún queda para rato).

    Y salvando las distancias... pero muchas distancias XDD, hace varios años, tuve una caída grave haciendo ciclismo. Lo cierto es que aún no he recuperado la confianza en mi mismo para estar al nivel al que estaba cuando me caí. Me comí una zanja en un camino y salí volando por encima del manillar. Ahora mismo, cuando me encuentro en la misma situación, incluso me llego a bajar de la bicicleta, por miedo a volverme a caer. Es increíble el cerebro humano, lo que llega a hacer.

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  5. Si Luis, es realmente fascinante. Por eso digo que me gusta mas la mecanica de los pilotos que la de los coches :-P
    Creo que nunca te habia visto por aqui (o quiza si, perdona mi memoria XD), bienvenido :-)


    Bueno mujer, ya se que no es lo mismo,pero es que no he podido evitar acordarme ^^Û

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  6. No voy a hablar como los periodistas-forofos que ya conocemos, ni voy a hablar de mediocridad-genialidad (se podría hacer un debate de como entender estas dos palabras y las veces que se usa mal, pero bueno).

    Dos compañeros de equipo tienen que estar de media en Posición X+1 o X-1 respectivamente uno de otro. Eso es lo que quiere un equipo. Lo de que el nivel del coche de Ferrari es la posición de Massa es una mentira que de tanto decirlo se creen que es verdad.

    Ya te lo he dicho, yo en tu caso estaría mosqueado con Massa por estar en la posición que esta. Que todo este circo es dinero y que lo descubras ahora me sorprende. Y si lo piensas por la competitividad pues... peor me lo pones.

    Yo me acuerdo cuando apoyaba a Minardi. Sabía que nunca iba a hacer nada. Pero que gustazo cuando se acercaba mucho... pues Massa lo puede hacer. Que lo haga. QUE LO HAGA YA, COÑO...

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  7. Es que me nieeego a creer que no lo haga porque no le da la gana. Algo le pasa y no es una rabieta, porque por mucho manager hijo de Todt y por muchos años que lleve, actuar asi es expulsion, aqui y en Pekin.
    Y tambien es verdad que hay muchos factores que no nos permiten obtener una respuesta... el coche que no tira lo que deberia, las ruedas, el compañero... ¿Donde esta realmente su nivel y por que no llega?

    Uy si, el gustazo que da que haga algo bien XD

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Todos los comentarios son bienvenidos, pero el respeto y la educación son muy bonitos (y el culo de Trulli también)