miércoles, 30 de noviembre de 2011

Vuelve






Parece que se ha confirmado que vuelve Kimi Raikkonen... pero con Lotus Renault

Siempre me cayó muy bien Kimi; fue de los primeros pilotos en quien puse los ojos (hombre, soy de carne, y el muchacho guapo es, pero guapo de estantería). De los que siempre hacían grandes carreras, carismático sin pretender serlo, tan a su aire que resulta admirable. Objetivo de todas las parodias, capaz de ser perdonado de su falta de rendimiento si luego se come un helado. Pocos me van a creer si digo que iba más con él que con Felipe hasta que llegó el fin de 2008.


¡Reconozcámoslo! ¡Es uno de esos pilotos sin los que no podemos estar!

Bienvenido de vuelta.

martes, 29 de noviembre de 2011

Finiquitado







Y se acabó el año.

La carrera no ha tenido en sí mucha sustancia, con lo que en este post me temo que hablaré más de las cosas que han ocurrido antes y después, y sobre todo entre bastidores. Porque este fin de semana me van a disculpar, pero se me ha puesto una alegría en el cuerpo al ver ciertas imágenes. Y es que aunque el mundial se haya sentenciado hace tiempo, el último GP siempre es especial. Añadiendo ciertas cosas que han pasado concretamente en este.




Por si no quedaba claro dónde era la carrera.


Primero, el GP.

Que ha ganado un Red Bull... pero el de Webber. Tras un posible aunque poco probable problema de Vettel con la segunda marcha.

"¡Echaba de menos la vista desde aquí arriba! ¡La calva de Horner se ve más brillante!"


Tsk. No pretendo que corra la sangre... Pero a mí lo de la caja de cambios me ha sonado a cuento. Lo siento, pero me vino a la cabeza lo de aquel famoso motor que estaba fallando y de repente no solo se arregló milagrosamente sino que Vettel obtuvo un gran resultado.

Y que nadie me entienda mal. No pretendo juzgarles como técnicos, como equipo o como profesionales. Y a los pilotos, menos, jamás voy a cuestionar su talento y menos el de semejante criatura salida de la mano de Newey. Pero en el equipo, a veces parece que los mandamases son los reyes del despiste, del invento y la polémica, del criticar a los demás cosas que ellos mismos hacen. Los hechos hablan por sí solos, el resto solo son conjeturas. Incluyendo las mías, y espero que sean vistas como eso: conjeturas.


Saliendo de las polémicas para ir a lo que importa, no fue una carrera espectacular, exceptuando un. Pero ya había muy poco que vender, exceptuando el subcampeonato esa cosa que se han inventado y que solo importa según le parezca a la gente, porque seamos, sinceros, ¿desde cuándo se aprecia el ser segundo? que aunque no era imposible si se antojaba muy complicado. Al final, Fernando perdió hasta el podio, porque el Ferrari volvió a dar muestras de esa bipolaridad que lleva luciendo todo el año: ahora te adelanto, ahora de repente las ruedas no responden. Y era imposible vencer a este espectacular Button.

En Red Bull se conformaron con el tercer puesto para Webber porque todos sabemos que el resto del año les ha importado un bledo donde quedase, hasta cuando Vettel ya tenía el campeonato no solo en el bolsillo sino enmarcado en su casa, y finalmente Button se hizo con el segundo.






Barrichello con sus peques mientras Silvana, su mujer, tiene muy claro quién va a ganar la carrera (aunque al final no acertara)


Vale la pena perseguir a Heikki con una cámara. Puede estar haciendo cosas como ésta.


Felipe celebró 10 años en la F1, incluyendo tres en Sauber, uno solo de test y uno que pudo haber sido y no fue, y 100 GP con Ferrari. 100 GP, un número redondo y genial para empezar de nuevo, en todos los sentidos, con el 101 el año que viene.


¡Un gran trabajo ese mini casquito!



A Fernando se le cae la baba con el pequeFelipe. Cualquier comentario al respecto acabará conmigo soltando un enorme AAAAAAAAAW.



Y hablando de Felipe, bien está lo que bien acaba, y toda rencilla se ha acabado con este abrazo.



Hamilton se acercó al box dispuesto a zanjarlo todo. Ha sido un año duro para ambos, y solo podemos desearles lo mejor de cara al año que viene. Mucha suerte.

Que por cierto, otro posible pique no ocurrió porque la caja de cambios de Hamilton dijo basta. Aunque quiero creer que no hubiera ocurrido de todas maneras.




Ruedas pegajosas: descripción gráfica





Y se acabó. Ahora toca descansar, reponer fuerzas, meditar... y la silly season... Espera, ¿pero no empezó junto con el campeonato este año?

A ver si me animo con una crónica de temporada.





PD- ¡Qué raro! Noe no se ha quejado de la gente que se queja de Felipe y que repite cien veces que el único record que ha tenido este año es el de primer piloto sin podios en 30 años...
¿Por qué?
Fácil.
Ya me he cansado de protestar.

lunes, 28 de noviembre de 2011

¡Feliz cumpleaños!



38 añitos (todo hay que decirlo, muy bien llevados), 10 al lado de Felipe y esperando que sean muchos más, tanto dentro como fuera de Ferrari.

Adoro a este hombre, punto.

¡Feliz cumpleaños, Rob!



No me he olvidado de la crónica, pero me va a quedar algo grande, y eso que apenas pasó nada en la carrera XD Así que se queda a medias hasta mañana...

domingo, 20 de noviembre de 2011

Brasil, meu Brasil brasileiro


El trofeo de este año es PRECIOSO.

Y se acaba el año...


Ojalá cierta personita pueda lucir este trofeo.
Un doblete sería aún mejor. Sería mágico.

lunes, 14 de noviembre de 2011

Una victoria muy dulce





Hamilton se lo merecía. Apagado, desquiciado, triste, extraño; faltan calificativos para describir al Hamilton de las últimas carreras. Por fin el inglés ha tenido la oportunidad de brillar con luz propia, y lo ha hecho con creces.



Posiblemente el prematuro abandono de Vettel nos "libró" de una carrera en donde se luchaba solo por la segunda posición hacia atrás... o de una preciosa lucha por la victoria de Hamilton con el alemán. ¿Quién sabe? Ganas no le faltaban. Vettel cometió un error (no fue el único este fin de semana en donde las pasadas de frenada pasaron factura) y su rueda pagó las consecuencias; fue imposible reemprender la carrera tras el paso por boxes. Y Vettel se vio obligado a ver el resto de la carrera (que era prácticamente toda la carrera) desde el muro (para mí los mimos sobraban un poco, pero no opino).




"Seb, que esto no tiene arreglo, anda, sal del coche..."
"Que no quiero"


Fernando, tras haber tenido la mejor salida del año y una de las mejores de su vida, consiguió por fin el trofeo que faltaba en su colección de triunfos. Ahora ya puede lucir Abu Dabi junto a los otros.


"¡Raqueeee, vete haciendo sitio en el Mueble Prohibido de los Trofeos!"


Y Button, sorpresa, arrebató el podio a Webber en la última vuelta, cuando el australiano tuvo que entrar a poner duras. Una estrategia un poquito surrealista. El australiano todavía debe estar preguntándose en qué estaban pensando... Aunque... ¿sorprende a alguien? A mí no.

La falta de podio cuando era posible me dejó un sabor agridulce, pero esa lucha con Webber me hizo disfrutar como hacía mucho de ese piloto que nunca daré por perdido, Felipe. No hizo una mala carrera, aunque sus resultados siempre queden en entredicho a nivel global. Aguantó a Webber, aunque por culpa de esta preciosa lucha Button quedó demasiado lejos para poder adelantarle y hacerse con un cuarto, quién sabe si tercer puesto. Sólo un inoportuno trompo le dejó demasiado lejos, pero aún así se las arregló para no perder posición. Yo esta vez no le vi "dormirse", no vi "desconectarse" esa neurona que hacía que fuera apagándose cual luz. Bien hecho, nene. Hamilton ya ha tenido su consuelo. Ahora te toca a ti.

Y para terminar, los doblados volvieron a darnos espectáculo, especialmente Maldonado y Jaime, luchando por adelantarse... e impidiendoselo a Webber y Felipe.



"Pastor, te apuesto mil euros a que no eres capaz de pelear delante de este cuando estés doblado"
"Rubinho, tío, tampoco te pases..."
"ACEPTO"

Los doblados tienen su propia carrera, y tiene que ponerte los nervios de punta estar en tu carrera y al mismo tiempo intentando no estropear la de los demás... así que soy incapaz de buscar un culpable en esto. Ambos fueron penalizados, pero sus puestos no sufrieron cambios. El caso es que en Abu Dabi hubo epidemia de ignorar banderas azules y Maldonado, desquiciado, no tuvo un buen fin de semana... ¿Serán nervios por la supuesta llegada de Kimi, o casualidad? Nervios aparte, no todo fue malo para Williams: Barrichello, saliendo ultimo, protagonizó una espectacular remontada aunque al final no logró entrar a puntos, y el propio Maldonado no está precisamente descontento con el rendimiento del coche. Poco a poco.



"¿Qué, crees que podrás ganar una carrera lo que queda de año con tu Ferrari?"
"¿Podrás hacer un podio con el HRT?"
"... Eres cruel"






PD- opino que en el previo sobraba el morbo gratuito de la (inexistente) "enemistad" Hamilton-Massa. Pero bueno, el morbo vende, y yo solo soy una minoría.

miércoles, 9 de noviembre de 2011

Y los sueños, sueños son...



Antes que nada, pido perdón por si alguien ha podido resultar herido o humillado, pero no puedo controlar a mi cerebro en su fase REM (si ni puedo cuando estoy despierta, cuanto más)...

La verdad es que puedo contar con los dedos de la mano las veces que he soñado con la F1 en casi cinco años de "enfermedad", y curiosamente, casi nunca son sueños "buenos". Desde un desenlace fatal en esos últimos días de julio de 2009 que me hizo despertarme lloriqueando, hasta un delirante secuestro de todos los pilotos y equipos perpetrado por terroristas islámicos, en no se qué circuito desértico... Claro que no todo son desgracias, una vez hasta soñé que conocía a mis niños de rosso y me hacía una foto con ellos, uno por cada lado. Todavía recuerdo el calorcillo de sus cazadoras de Ferrari. No me despierten :-)

Pero lo de anoche...

Recordaba más detalles apenas despertarme, pero como suele ocurrir con los sueños, estos se van desvaneciendo a medida que pasa la mañana. Ahora solo tengo flashes. Lugares, personas y secuencias que se mezclan, y la clásica locura onírica en que a ratos lo ves desde fuera, a ratos estás en el lugar de los hechos...

El caso es que había un paddock, no sé de qué circuito. Un periodista que juraría que era Jacobo Vega (pero no estoy nada segura, la verdad, porque en mis sueños la gente tiene como cinco o seis identidades a la vez) le iba a hacer una entrevista doble a mis niños de rosso. Todo iba muy bien hasta que se hizo no se qué pregunta, y un comentario gracioso y sin mala intención. No recuerdo cuál exactamente pero sí la semántica que había detrás... Algo sobre pilotos nº1 y nº2, sobre órdenes de equipo, sobre escuderos de brillante armadura o no tan brillante... Vamos, que se va a armar. Y se armó.

Depende de a qué neurona le pregunte, me sale:

que Felipe atacaba a Jacobo y Fernando le intentaba agarrar en el clásico momento "¡Felipe, que te pierdes, piensa en tu tensión!"
que Felipe atacaba a Fernando. No sé si alguien intentó frenarle. Dios...

Y luego, mientras salían titulares de todo tipo y los periódicos se estremecían de gusto con sus exclusivas e inventos, se descubrió que en realidad Fernando fue el único que atacó. ¡Lo que no sé a quién, si a Jacobo o a Felipe!

Recuerdo hasta haber leído la transcripción de la entrevista, lo que ponía, qué provocó tal ataque de ira... pero se desvaneció en cuanto abrí los ojos esta mañana.

Luego, lo siguiente que recuerdo es una visita al muro de Ferrari. Todo eran caras desconocidas. Recuerdo que me volví loca diciendo "¿Y Rob? ¿Dónde está Rob? Ah, míralo ahí, pero, ¿por qué no está en su sitio?"...

Todo esto, con narración de Antonio Lobato incluída, explicando esos cambios.

Y Andrea Stella tenía estos pelos.



Hasta Lobato se descojonaba.

Creo que le dedico demasiado tiempo a la F1...

sábado, 5 de noviembre de 2011

Lo que importa está dentro del equipo


http://www.totalrace.com.br/site/entrevista/2011/11/exclusivo-nao-destrui-a-confianca-de-massa-diz-alonso



Exclusivo: “Não destruí a confiança de Massa”, diz Alonso

Alonso comemora seu nono pódio no ano, na Índia
Alonso comemora seu nono pódio no ano, na Índia
Crédito da foto: Divulgação/Ferrari


Espanhol elogia o companheiro, garante ignorar o risco de acidente quando está na pista e aprova novos circuitos

Enquanto o paddock fervia com troca de experiências sobre o país que estreava no calendário da Fórmula 1, a reportagem do TotalRace se dirigia ao HC da Ferrari, às 15h30, horário de Nova Delhi, Índia, na quinta-feira, dia 27 de outubro, para uma entrevista especial.

Em uma sala do segundo andar, uma mesa e três cadeiras vazias. A espera durou dois minutos, no máximo, até a chegada do entrevistado: Fernando Alonso. O bicampeão do mundo tem uma postura particular em entrevistas exclusivas. Dificilmente olha nos olhos do entrevistador. Desvia o olhar para a mesa, foca o celular, o gravador, seja qual for o objeto sobre ela. Se parece distraído, suas respostas mostram o contrário – Alonso é um dos mais lúcidos do paddock e suas palavras, sempre escolhidas a dedo, demonstram enorme capacidade de reflexão.

Em alguns momentos, enquanto uma pergunta é formulada, o espanhol mira o jornalista com olhar fulminante. Um olhar capaz de minar a confiança do “adversário”, algo que Alonso sabe como poucos. Mas seria essa sua principal característica? Destruir a confiança dos companheiros de equipe. Em relação ao brasileiro Felipe Massa, Alonso discorda.

“Não penso que a confiança de Felipe esteja destruída. Penso que ele é sempre o mesmo piloto fortíssimo. Vimos isso claramente nas últimas seis corridas, quando ele largou em quatro oportunidades à minha frente (na Índia, Alonso largou à frente de Massa). Estamos muito próximos se avaliarmos as classificações.”

O desfecho da resposta de Alonso tornava necessária a réplica: mas e em ritmo de corrida? “Em corrida eu não sei. Seguramente quando o carro não é muito rápido, não é veloz, é muito difícil fazer uma boa performance ou coisas boas. Tenho muito respeito por Felipe e o vejo como um dos melhores pilotos do mundo. Estou certo que, se tudo der certo e tivermos um carro competitivo no próximo ano desde o começo, ele é um dos favoritos a vencer em todas as corridas.”

As recentes mortes de Dan Wheldon, na Fórmula Indy, e de Marco Simoncelli, na MotoGP, aqueceram a discussão sobre a segurança nas pistas. Alonso, um dos líderes dos pilotos da F-1, tem opiniões bastante claras, e garante que risca de seus pensamentos o perigo ao qual está sujeito.

“Removo completamente (o risco). Não penso jamais no risco ou na possibilidade de haver um incidente quando estou em um carro. Está fora de todos os meus pensamentos. Mas é certo que em momentos difíceis como este no esporte a motor, você se recorda que é um esporte perigoso e que, em velocidade acima de 300 km/h, se tiver um problema está arriscando a vida. Mas a paixão por carros e pela velocidade é tão grande que te faz esquecer tudo toda vez que fecha a viseira.”

Na Itália, país da escuderia por onde pilota, a discussão atingiu o ponto de questionar-se corridas deveriam ou não serem feitas.

“Penso que não seria justo (abolir as provas). Há tantas coisas no mundo que podem melhorar. Temos que aprender com os erros e com as coisas que não vão bem, para melhorar a segurança que é o mais importante. Isso é um espetáculo que acontece a cada dois domingos para fazer esporte e as pessoas felizes em casa. Isso é um show em geral. Mais ou menos arriscado que outros shows. Estou certo que é menos arriscado que o cinema, quando se faz um filme. Mas no fim estamos nós livres para escolher o que queremos fazer. O que queremos fazer é competir com carros. Abolir é um pouco demais. Mas melhorar é sempre necessário.”

Em Delhi, na Índia, mais uma obra de Hermann Tilke ganhou vida. O circuito do alemão foi elogiado, mas a reputação do arquiteto não é das melhores. Muitos o condenam de realizar pistas chatas que proporcionam pouca emoção. São frequentes os argumentos de que autódromos tradicionais, como Spa, Suzuka e Interlagos são mais desafiadores, ainda que menos seguros. Na balança entre moderno e clássico, seguro e ousado, Alonso opta pelo caminho atual.

“Prefiro os circuitos novos. Chatos ou não é difícil dizer. Penso que, sobretudo este ano com as novas regras, vimos muitas ultrapassagens que ninguém esperava. Não acho que seja um problema do circuito em serem chatos ou não. Não acho que os circuitos tradicionais são mais divertidos. Talvez sejam mais belos para guiar, porque temos curvas interessantes. Os novos podem parecer uma cópia dos anteriores. Mas penso que as pessoas devem gostar de todos os circuitos porque o show é sempre o máximo.”



Nada que añadir :-)

Disculpen que esté en portugués, pero creo que se entiende muy bien.

miércoles, 2 de noviembre de 2011

Un camino


Ayer, el insistente rumor de Rosberg llegando a Ferrari más pronto que tarde provocó una enorme proliferación de tweets por mi parte y la de los que me leían. Como siempre, no me puedo resistir a reflexionar sobre ello.

La gente me lo dice mucho: Noe, no te lo tomes tan a pecho todo. Cuánta razón tienen.

Doy la impresión de que pronto traspasaré la barrera hacia el forofismo puro. No se trata de eso. De hecho, como fan, la perspectiva de verle empezar de cero en otro sitio es muy emocionante. Pero antes, siento que le debe algo a Ferrari, y que Ferrari se lo debe a él, como dije ayer. Lo que frustra es que esperes mucho y acabe con un año como este, ese eterno querer sin poder...

Lo primero que se saca a relucir es la eterna pregunta:"¿Por qué, si tienen el mismo coche, hay tanta diferencia?" Sin meterme a despotricar contra las comparaciones, que siempre me parecerán odiosas, no es una pregunta que se responda con facilidad: incluso si de técnica entiendo poco y he dicho muchas veces que soy más de mecánica de pilotos que de coches, está claro que hay demasiados factores en juego (quizá podemos aplicar la misma lógica a Red Bull, pero no es el momento). Un mismo coche puede llegar a ser totalmente distinto en manos de dos pilotos distintos, y más un coche con tantas carencias como es el Ferrari de este año. No hace falta irse muy lejos: en 2009, Kimi intentaba hacer podios con un coche que Fisichella no lograba meter en los puntos."El piloto no se hace al coche" es, quizá, más correcto que el directo y más hiriente "es un paquete". El propio Rob Smedley no paraba de repetir que el coche de 2009 era muy difícil y que sus pilotos tenían un enorme mérito. En ese momento era subcampeón del mundo y llevaba el equipo sobre sus hombros de la misma forma que ahora lo hace Fernando. Y entonces todo se torció en esa nefasta Q2.

Una de las personas con las que hablé ayer comparte conmigo cierto cariño por Felipe, más veterano, además, hasta le damos caña si hay que dársela (él más que yo, ¡lo reconozco! XD), y una de las cosas que se sacó en claro fue que posiblemente el principal problema de Felipe es que no se ha adaptado a los grandes cambios que se han producido a su alrededor. No puedo sino estar de acuerdo. Ambos opinamos que Felipe ha llevado en silencio el peso del accidente, y lo que más me convence es que el propio Felipe lo niegue. A la defensiva, se excusa en una entrevista: "¿Quién dice eso? ¿Dónde están?" Me entraron ganas de levantar la mano tímidamente...

Si alguien que lleva las carreras en sus venas admite que tiene la más leve secuela psicológica, no se vuelve a subir al coche. Pero el principal problema en este tipo de casos es que, a veces, el que ha pasado por algo así no se da cuenta. Por eso hay que negarlo y tratar de seguir adelante... aunque algo muy dentro de ti te proteja. Quizás ahí está todo. O quizás no. Sólo lo saben él y su entorno. O, quizás, sólo él. Ya he dicho muchas veces que un accidente así lleva, como mínimo, dos años para una recuperación completa (y puesto que ya he hablado de ello, no voy a entrar en más detalles esta vez): si esto se cumple en el caso de Felipe, quizás volvió demasiado pronto y se encontró con que ya nada era como antes. El lugar donde está tampoco es el mejor de los lugares para pedirle a la gente otra oportunidad: todos los ojos están fijos en cada uno de tus movimientos, y el juicio sale solo, fácil y precipitado.

Muchos me dicen que la F1 no perdona, ni espera a nadie, porque se mueve a una velocidad frenética y mueve millones y millones. Eso es algo que sé perfectamente, pero saber algo no implica que deba gustarme, ni aceptarlo sin más, no sin al menos dar mi punto de vista al respecto. Por eso tengo este blog, y por eso tengo tantísimo aprecio a todos los que están dispuestos a debatir. Siempre quiero debatir, aprender de todos, aunque no pueda enseñarles nada. Es lo más enriquecedor de compartir una pasión.

En otra conversación a varios leí que quizá lo importante no era que Felipe se quedara en Ferrari, sino que Ferrari "se quedase en Felipe". Siempre he querido negar esas paranoicas creencias, pero ciertamente, es la sensación que da desde fuera. Sólo lo saben ellos. Ese equipo inquebrantable, casi de hermanos, que forman Smedley y él, están sumidos en su propia lucha. Rob se desquicia cuando le falla, le anima cuando le ve fuerte, y como él, no se rinde ante la falta de resultados. Por eso me gusta. No porque le vea un gran "pilotazo" ni con alma de campeón (aunque 2008 no fue un espejismo), sino porque sigue ahí, luchando por hacerse ver. Lo demás ya son maneras de ver las cosas.

Felipe tiene que encontrar el camino. A veces vemos ramalazos del Felipe de antes: interesantes luchas, buen ritmo, unas buenas salidas. El camino está ahí, a veces lo ve delante suyo... y de repente se le escapa. ¿Lo conseguirá? No hay respuesta, sólo se puede esperar. Hace falta coche, un coche que no aumente sus carencias.

Lo que no se puede negar sin más es que Felipe es terriblemente fuerte: nadie que no lo sea es capaz de volver tras todo lo que le ha pasado, rodeado de una presión capaz de hundir a cualquiera. Se le escapa la fuerza por la boca porque lo sabe, sabe que no lo tiene fácil. No es fácil llevar encima el sambenito de no haber hecho podio esta temporada (aún...), el de encontrarse tanto problema de última hora en la pista, que te comparen constantemente con tu compañero, que te analicen desde fuera para ver por qué estás como estás (¡yo lo estoy haciendo ahora!)... Depende de su equipo, pero también de sí mismo, para encontrar ese camino. Han sido seis años de rumores, y sigue ahí. Eso tiene más valor del que parece.

Un compañero en esta "difícil prueba" en que se ha convertido apoyar a Felipe, ante mi poca esperanza de que la cosa cambie, ante mi convencimiento de que este deporte puede llegar a ser bastante injusto, me dijo que encontrará ese camino. Que no se puede vender esto como una derrota... aunque sea por él.

Luego nadie me podrá decir que dejé de animarle antes de verle de nuevo regresar por el buen camino.

martes, 1 de noviembre de 2011

Rachas



La actitud de Felipe en el GP de la India me divide en dos. ¡Como si ya no estuviera lo suficientemente dividida con respecto a Ferrari!

Sacando el lado lógico, no puedo aprobar la actitud que mostró con sus declaraciones. Pero sacando el lado bueno, me gusta que sea "egoísta". Aunque no vea sus errores. Sinceramente, me preocuparía más un piloto que ni se defiende. En la situación que está, no le conviene nada mostrarse débil, aunque quede como un quejica porque no tenga razón. Pero no es la manera más correcta de proceder.

En un ambiente tan cargado, el rumor de que viene Rosberg se ha incendiado de forma destructiva. Que Rosberg calle y que Mercedes todavía no le haya renovado no ayudan, más bien al contrario. Tampoco ayuda el extraño estado de ánimo de Hamilton. Aunque darle más importancia a sus peleas es vender polémica por venderla: son los dos a los que peor les va dentro de los seis primeros. Es lógica pura que choquen (aunque sea literal).

¿Es justo lapidar de esta manera a Felipe cuando este año ha tenido un coche que en su caso aumenta sus fallos y agrava sus carencias? ¿Es justo lapidarle cuando por una vez es el único responsable de un incidente? ¿Es justo echarle toda la culpa, cuando siempre que tiene un ritmo estupendo, algo externo falla?

Para mí, sería una insusticia, porque Ferrari no puede quitarse de encima toda la culpa: no han tenido competitivdad ni coche, sus pilotos no han estado en igualdad de condiciones (ojo: no estoy diciendo que no hayan tenido el mismo material)

Volver tras un accidente que casi te quita la vida. Ser segundo en Bahrein y que la gente solo tenga ojos para la nueva esperanza de Ferrari, que ha quedado primero. Ser el más odiado por una orden mal llevada.

Que la prensa especule con tu asiento siempre añade presión, pero que especule todos los días y lo haga con un piloto distinto cada vez debe ser asfixiante.

Ver que el ansiado podio no llega tampoco ayuda. El propio Felipe ha dicho que ciertamente es frustrante no ver un podio, que es difícil motivarse en esas circunstancias. Un círculo vicioso eterno, mareante.

El otro día me decían que estar en Ferrari no ayuda a sus pilotos. Y no puedo estar más de acuerdo. No en el sentido literal, sino refiriéndose a lo duro que es estar en un equipo como Ferrari, en donde ya de forma automática se espera de tí que nadie te tosa, en donde ya se espera el mejor coche del universo. En donde no se sabe si se quiere dos pilotos fuertes o un rey con su escudero. En donde todos los movimientos son estudiados. En donde cada temporada los rumores sientan a unos cinco pilotos de media. Ferrari no puede tener una mala racha, enseguida se buscan culpables. Que los otros equipos ganen no hace sino afianzar todavía más sus carencias.

Por favor, Felipe, vales más que lo que parece, vales más que unas palabras dichas sin pensar, más que una defensa ciega, más que decir y no hacer. Has pasado por todo lo que he dicho y más, te han querido echar desde que llegaste, y sin embargo, sigues ahí.

Ahora tienes que demostrarlo. Y ojalá Ferrari te de la oportunidad de hacerlo en 2012... ¡si realmente van a tener ese coche que tanto prometen!