Humanos, después de todo

Por fin ha vuelto Blogger. Creo que mi anterior post desapareció; recibí comentarios por él en mi correo, pero nunca llegué a verlo publicado y ha desaparecido de la faz de Blogger. Curioso, cosas de Internet.

¡La que has liado, Felipe! A un medio italiano le ha confesado que siempre intima (vamos a dejarlo ahí XD) con su mujer los sábados antes de las carreras... Vale que se ha hecho mucho eco el temita y que no es para tanto, no es algo que tenga que trascender, pero reconozco que tiene su guasa, una guasa simpática que no ofensiva (al menos no ni por mi parte ni por la de mi gente formulera) que ha dado pie a divertídisimos Tweets y comentarios. Por supuesto ni que decir tiene que han corrido (no pun intended) ríos de tinta. Sobre todo por cómo se dice carrera en portugués... *un tupido velo*



No es que quiera darle tanta importancia ni publicidad a algo que es natural, normal (hasta sano XD) y anecdótico, pero esta que escribe ha tenido varios ataques de carcajadas contínuos. No por el hecho en sí, por supuesto, sino por lo que ha acarreado.

Muchos de los comentarios no tienen desperdicio (excepto algunos que solo buscan ofender, como siempre, nada nuevo bajo el sol), pero el epic win se lo lleva la foto que corona el artículo que he enlazado. Esa foto que no dice ná y lo dice tó. Grandísimo mi compañero de la web por elegirla XD

Y es que de vez en cuando ver la faceta humana que no deportiva es algo muy entretenido, especialmente si se usa el humor sano... Siempre y cuando nuestros protagonistas lo autorizen, claro, que una cosa es contar y otra robar. Después de todo, el propio Felipe lo ha dicho. Es curioso cómo contesta a todo lo que le preguntan, hasta a cosas como esa... Su lado "gamberrete", sólo espero que Raffaela no le haga dormir en el sofá en la próxima carrera ;) Alma cándida, cuidado con lo que dices, que luego queda publicado...


Lo otro ya no es tan bonito: la agresión de Sutil a un miembro de Lotus Renault, que no fue precisamente una pelea tonta de bar tras unas copas de más. Reconozco que me he quedado no muda, sino muerta. Habrá juicio, al menos ya hay denuncia. Ocurriera lo que ocurriera, estas cosas nunca son justificables. Es muy grave: podría perder su licencia. No sé qué le pasaría por la cabeza, ni que pasó, pero estoy muy impresionada.



Por supuesto, hay que cogerlo con pinzas, que ya se sabe que los rumores son como bolas de nieve, aunque las fuentes parecen fiables. Y en palabras de un colega, el silencio de Hamilton (su amigo desde hace años) es muy esclarecedor...

A ver en qué acaba todo esto...